2-) Felicítate por tus logros: cada que hagas algo bien, no dudes en felicitártelo, a tí mismo. Sabemos cuando hacemos bien las cosas, cuando somos parte de una buena acción, cuando procuramos hacer correctamente las cosas. Y tenemos que hacérnoslo dar cuenta!.
3-) No esperes ser perfecto: porque siempre nos equivocaremos. Aprender a aceptar nuestros errores es tan importante como aprender de nuestros errores. Siempre estaremos equivocándonos, porque somos de naturaleza imperfecta. Por esto, aceptar ese detalle es dar un paso adelante.
4-) Dí lo que piensas: sin temor (aunque tampoco exageres!). Dar a conocer nuestro pensamiento es una forma también de reforzar nuestra seguridad para con nosotros mismos. Todos tenemos el derecho a dar nuestra forma de ver las cosas, nuestra opinión, nuestra idea. Y es igual de importante que las otras.
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